Cacería de historias: Verdad o reto

Es la ultima noche del año, afuera hace frio y la nieve cubre tanto calles como jardines. Tienes una fiesta con tus mejores amigos y en la casa de enfrente los padres de todos realizan su propia celebración. Entonces alguien tiene la idea de jugar Monopoly, pero cuando las copas hacen efecto alguien más propone jugar verdad o reto. Poco a poco, las cosas comienzan a retorcerse, secretos salen a la luz entre las preguntas, los desafíos y el alcohol. Y te enteras de cosas que ni siquiera imaginabas de las personas a las que mas quieres y, hasta esa noche, creías conocer mejor que nadie.

 

Lo anterior es el argumento de la novela Verdad o reto de la autora sueca Camilla Läckberg, apodada la “reina de la novela negra” (o eso dicen los comentarios en las solapas del libro). En lo personal, no había tenido ningún acercamiento a la obra de Láckberg a pesar de encontrar su nombre muchas veces en las librerías. Al final, me ganó la curiosidad y opté por esta corta novela de apenas 124 páginas para conocer un poco a la autora.

Su producción, como ya dijimos antes, se enfoca principalmente en novela negra, enfocada en la resolución de un asesinato. Bajo esta fórmula, ha publicado varias novelas conocidas como “serie Fjällbacka”. Tiene también un par de libros de cocina, algunos cuentos infantiles y una saga de novelas que escribe junto a Henrik Fexeus, mentalista y experto en lenguaje corporal. Pero la novela que nos ocupa ahora no tiene nada que ver con ninguna de sus sagas anteriores.

 

Pasó en Nochevieja

Verdad o reto es una novela que tiene un inicio bastante interesante. Tiene un estilo y ritmo bastante ágil que en pocas páginas logra presentarnos a sus cuatro protagonistas, mostrarnos como son y todo lo que ocultan bajo la fachada de tener unas vidas perfectas. Pero esta imagen de perfección no solo la mantienen con sus compañeros de la escuela, también entre ellos. Y esto es tan solo la primera parte, la cual funciona de manera increíble para mostrarnos a los personajes principales y todo su trasfondo, dotándoles de su debida personalidad, con virtudes, defectos y todas las situaciones que le san roto por dentro.

 

Nuestro elenco lo componen Liv, una chica con tendencia a mentir y que, en palabras de sus amigos, no se sabe que está pensando; Martina, la popular de la escuela y gran estrella en redes sociales; Anton, un prepotente y explosivo joven que suele arrepentirse de lo que dice; y Max, el más calmado del grupo pero con las ideas más descabelladas.

 

Nuestra historia comienza con Liv, quien se dirige en taxi a la casa de Max, donde será la fiesta de Año Nuevo. Los jóvenes están convencidos de no pasar la ocasión con sus padres, quienes estarán en la vivienda de enfrente y es propiedad del padre de Anton. Al inicio podemos ver como Liv y Max empiezan a coquetear hasta que son interrumpidos por Anton y Martina. A todo esto, Max y Martina son novios mientras que Anton se siente atraído por Liv, lo que origina algunos roces entre los cuatros jóvenes.

 

Mientras esperan a que llegue el servicio de banquetes contratado para la ocasión, nuestros protagonistas buscan la manera de entretenerse. Entonces Liv encuentra un tablero de Monopoly y convence a sus amigos de jugar una partida. Lo que inició como un inocente juego de mesa para matar el tiempo, pronto se deforma cuando Max propone jugar verdad o reto cuando alguien caída en una casilla propiedad de otro jugador. Las cosas escalan y tenemos desde preguntas incomodas hasta retos cada vez más atrevidos y peligrosos, donde una mezcla entre la diversión y el alcohol terminara por romper con todas esas mascaras que nuestros protagonistas han forjado y la verdad sale a la luz.

 

El reto es enfrentar la verdad

Verdad o reto es una novela cortita y directa a lo que va. Su estructura es de cuatro actos, siendo cada uno más corto que el anterior. En el primero tenemos la presentación de cada uno de los protagonistas, donde conocemos un poco de sus vidas y todas esas cosas que cargan en su interior y nadie más sabe. El segundo, mientras se les ocurrían retos cada vez peores, presenta la ruptura de sus mascaras y saca a relucir la verdad que cada uno escondía. Finalmente, en el tercer y cuarto acto vemos que ellos se deciden a poner manos a la obra para enfrentar todo aquello que cargan tramando una venganza contra aquellos que les han lastimado.

 

Los primeros dos actos son, a mi parecer, lo mejor de la novela. Están bien explicados y realmente te hacen empatizar con las protagonistas femeninas. De los otros dos, es más complicado sentir esto; en especial si hablamos de Max, pues aunque tuvo una infancia difícil y su familia está fracturada, es el malicioso de los cuatro. Es quien impone los retos más difíciles, quien tuvo la idea de este juego y quien termina por coordinar el plan que estos jóvenes ebrios trazan para enfrentarse a quienes les han dañado. A él no se le ocurre, pero es quien organiza todo. Y aunque los dos últimos actos deberían ser de lo más intensos, da la impresión que toda la tensión creada con anterioridad se desinfla muy rápido.

 

Si tomamos en cuenta que Camila Läckberg tiene aún pendientes otras novelas de sus sagas ya reconocidas, podemos deducir que Verdad o reto no es una obra que busca trascender. Es posible que su intención fuera para relajarse un poco de historias complicadas y, a la vez, ofrecer a sus lectores algo con que mantenerles enganchados. Porque eso debemos decirlo, no estamos ante una novela que busque trascender o cambiar paradigmas literarios, pero si es un libro con el cual podemos pasar un buen rato con su lectura.